Director de La ley del silencio (On the waterfront, 1954): Elia Kazan

Reparto: Marlon Brando, Eva Marie Saint, Karl Malden, Lee J Cobb

Terry Malloy (Óscar como mejor actor para Brando) es un ex boxeador que trabaja para Johnny Friendly (Lee J. Cobb) que controla de forma mafiosa los sindicatos de estibadores de Nueva York. Terry se enamora de Edie Doyle (Eva Marie Saint) y conoce al Padre Barrie (Karl Malden), quién le convence para que denuncie a su jefe, el cual ya ha asesinato al hermano de Eva.

Terry se pone en el lugar de Edie, como apunta la metáfora de probarse su guante en el parque y descubre el otro lado de la moneda. Tampoco el papel de Karl Malden es casual, si es presentado como un sacerdote en busca del bien es porque su papel religioso es lo más opuesto a los valores comunistas contra los que lucha el MacCarthysmo.

Kazan realiza en este filme una justificación de sus delaciones frente al comité de Actividades Antiamericanas durante el MacCarthysmo. A cuyo comité facilitó los nombres de sus compañeros en el partido comunista. No todo el mundo está de acuerdo con su chivatazo. En 1999, cuando la Academia le otorgó el Óscar honorífico, Nick Nolte y Ed Harris entre otros muchos no se levantaron a aplaudir.

Un renglón aparte merece el papel de Marlon Brando, no solamente llevó al límite los recursos del método, sino que realizó un trabajo que ha quedado como modelo interpretativo para las generaciones de actores y actrices venideros, un punto de referencia sin parangón en la historia del cine.

Además de los actores, La ley del silencio se llevó los Óscars de mejor película, director, guión (Budd Schulberg), fotografía (Boris Kaufman), dirección artística y montaje. No se puede pedir más.