Director de Lady Hamilton (That Hamilton Woman, 1941): Alexander Korda
– Hay tres tipos de maridos engañados en el mundo: primero están los que nacieron para ser engañados; segundo, los que no lo saben y tercero, los que no les importa. Hace algún tiempo que me pregunto en cuál de los tres estaré yo
– Has olvidado el cuarto tipo, William: los que son duros, vacíos y no dan nada. Te casaste conmigo porque querías un nuevo ornamento para tu casa, como ese cuadro, esa estatua o el jarrón. Por lo que a ti respecta yo soy igual de ornamental, igual de muerta
– Pero querida ¡Cómo puedes decir que mis estatuas están muertas! Cuando estoy solo y algo cansado pienso en lo que es para mí tener mis estatuas conmigo. Pienso que siempre me serán fieles, que no envejecerán, que no se irán con ningún marinero
Lady Hamilton es una de las mejores mujeres del mundo y un honor para su sexo
Caballeros ¡Nunca harán las paces con Napoleón! Napoleón no puede ser el dueño del mundo hasta que nos haya destrozado, y créanme, caballeros, ¡él quiere ser el dueño del mundo! No puedes hacer las paces con los dictadores ¡Tienes que destruirlos, borrarlos!
¡Nos contaron sus victorias pero no el precio que pagó!