Autor de La ciudad de los prodigios (City of prodigies): Eduardo Mendoza
Con Madrid acabaremos a palos, pero sin Madrid no iremos a ninguna parte […] hay que pactar con Madrid; será una humillación, pero la causa bien lo merece
La ciudad de los prodigios es un amplio lienzo de la ciudad de Barcelona que cubre el espacio desde la Exhibición Universal de 1887 hasta el crack de 1929.
El costo de la construcción había ascendido a cinco millones, seiscientas veinticuatro mil seiscientas cincuenta y siete pesetas con cincuenta y seis céntimos. Algunas instalaciones pudieron ser aprovechadas para otros usos. El remanente de deuda fue enorme y gravó al Ayuntamiento de Barcelona durante muchos años. También quedó el recuerdo de las jornadas de esplendor y la noción de que Barcelona, si quería, podía volver a ser una ciudad cosmopolita
Los pobres sólo tenemos una alternativa, se decía, la honradez y la humillación o la maldad y el remordimiento
Su protagonista, Onofre Bouvilla, es un hombre hecho a sí mismo, reparte propaganda anarquista y vende crecepelo pero sabe aprovechar las favorables circunstancias sociales de este periodo para triunfar en los negocios.
Yo creía que siendo malo tendría el mundo en mis manos y sin embargo me equivocaba: el mundo es peor que yo