Autor de La invención de Morel (Morel’s invention): Adolfo Bioy Casares

La invención de Morel, de Adolfo Bioy Casares, es una obra de literatura fantástica en la que la soledad representa la muerte y el amor, la vida.

Ya no estoy muerto, estoy enamorado

El fugitivo protagonista comienza su diario cuando unos turistas llegan a la isla desierta en que se esconde, por lo que se siente amenazando porque podrían entregarlo a las autoridades.

Entre los turistas se encuentra una mujer llamada Faustine, de la que termina por enamorarse pero al acercarse, ella parece ignorarle.

Todos los visitantes desaparecen y luego vuelven mientras en el cielo se observa la presencia de dos soles y dos lunas porque el científico Morel dispone de una máquina que grava la realidad y la superpone posteriormente, de ahí la duplicidad de soles y lunas.

Creo que perdemos la inmortalidad porque la resistencia a la muerte no ha evolucionado; sus perfeccionamientos insisten en la primera idea, rudimentaria: retener vivo todo el cuerpo

Finalmente, el Fugitivo espera que su alma se transfiera a la grabación mientras muere y así entrar en la conciencia de Faustine para fusionar sus almas.

Búsquenos a Faustine y a mí, hágame entrar en el cielo de la conciencia de Faustine. Será un acto piadoso